Encontrar la manera de ahorrarse unos eurillos en casa nunca está de más (¡y qué te vamos a contar cuando suben los precios de casi todo!), y seguro que te conoces algún truquillo para estar recortando de un sitio y otro. Si estás en tu hogar, mira alrededor: ¡tienes muchas maneras de ahorrar energía!
Algunas te sonarán más que otras, pero todas te van a ayudar en mayor o menor medida a que la factura de la luz sea menos abultada. Así, tanto en invierno como en verano (estaciones que se están haciendo cada vez más largas) necesitarás depender menos tanto de calefacciones o estufas como de aires acondicionados o ventiladores. Y para descubrir si te has quedado con la copla, ¡al final de esta publicación te retamos a un juego!
Consejos para ahorrar energía
Pero como somos legales, te vamos a dar unos truquitos antes de que averigües si eres la Greta Thunberg de tu propia casa. Hay tres pilares fundamentales en un hogar: luz, agua y calefacción. Si sigues estos consejos, ya verás como empiezas a ir notando que la factura ocupa menos hojas y las barras de los gráficos son cada vez más cortas.
Cómo ahorrar luz
Seguramente leas esto desde un lugar soleado como España en la mayor parte de casos, así que, alma de cántaro, ¡aprovecha la maravillosa luz del sol! Es verdad que puede que vivas en un lugar con pocas ventanas o en un bajo, y en esos casos tendrás que usar otros trucos para no consumir tanta energía. Pero si tienes un piso con ventanas, usa la luz natural que entra a lo largo del día.
Iluminación
Continuamos: pinta paredes y techo de colores claros, ya que retendrán al máximo el calor y darán más luminosidad. Hablando de iluminación, ¡no te olvides de apagar las luces si no estás en una estancia! De hecho, una muy buena opción en este sentido es instalar sensores de movimiento.
Ni que decir tiene que usar bombillas led es el gesto más eficiente que puedes tener: gastan cinco veces menos y duran diez veces más que las tradicionales. Y te recomendamos en especial que esa luz que utilices, si puedes, provenga del autoconsumo solar. Es el momento adecuado, ya que se están subvencionando instalaciones. ¡Aprovecha!
Electrodomésticos
Los electrodomésticos probablemente los aparatos que más consuman de todo el hogar porque son los que tenemos puestos durante más tiempo a lo largo del día. Por eso es fundamental que intentes adquirir los que tengan una mayor eficiencia energética (mira la etiqueta que los acompaña) y que los apaguemos si no hay nadie en casa. Desconecta la tele apagando, por ejemplo, la regleta entera. Y la nevera, si te vas de vacaciones, vacíala y baja el interruptor de la luz general.
Cómo ahorrar agua
Lo de las épocas más frecuentes de calor impacta directamente en las reservas de agua, un bien que está escaseando. No descuides la importancia de cerrar el grifo mientras realizas tareas cotidianas (como lavarte los dientes, las manos, etc.), y solo ábrelo cuando ya vayas a consumir agua. En la ducha, igual: cierra el grifo cuando te enjabones cabello y cuerpo. Y, lo sentimos, pero estate una temporadita sin darte esos baños que te encantan. La cosa es seria.
Si tienes inodoro con doble descarga, usa el accionador completo solo cuando hagas aguas mayores. Para el resto de los casos, mejor usa el que gasta menos agua (que suele ser el anillo exterior, aunque depende del diseño). Echa un ojo a grifos que actualmente tienes disponibles, como los de limitador de caudal; nuevas aperturas que evitan fugas de agua, o griferías termostáticas que dan agua caliente rápido y la mantienen. Y otra manera de ahorrar es aprovechando el agua de lluvia: recógela con recuperadores y riega con ella las macetas.
Cómo ahorrar calefacción
Cuando llegue la época de un frío que te pelas, recuerda que es más eficiente mantener la calefacción a una temperatura constante de entre 19 y 21 grados que ponerla muy alta y luego tener que apagarla. A más calor, más consumo energético. Aquí es clave un termostato. Además, si aíslas la casa con unas buenas ventanas y materiales de recubrimiento, vas a notar cómo no se te escapa el gato (vamos, que no se va el calor).
Cómo ahorrar aire acondicionado
Para acabar, en épocas de mucho calor evita la tentación de encender el aire acondicionado durante una horita a 20 grados. Consume muchísima energía. Lo mejor es que lo mantengas constante por encima de los 25 grados. En este caso, a más frío, más consumo. Esto, junto a un buen aislamiento, te permitirán estar muy fresquito en tu casa.
Los anteriores consejos te ayudarán a pasar las inclemencias climatológicas sin apenas notarlo y, así, que no te dé un soponcio cuando llegue el mail con la factura de la luz. ¿Y lo bien que se siente cuando sabes que, además de ahorrar dinero, estás ayudando al planeta? ¡Eso sí que no tiene precio!
Recuerda:
- – Para ahorrar luz, aprovecha las horas del día y usa luz natural; pinta las paredes de colores claros; cámbiate a bombillas led y apaga los electrodomésticos cuando estés fuera.
- – Consumir menos agua es posible: cierra el grifo cuando no estés usando agua; date duchas e instala reguladores de caudal o aprovecha el agua de las lluvias.
- – En el caso de la calefacción y el aire acondicionado, el término medio es la virtud: caliéntate entre 19 y 21 grados y enfríate por encima de los 25 grados.
