Si alguien de tu entorno suelta un “¡Doc, lo hemos conseguido!” sin venir a cuento, ya sabes lo que toca: sorprenderle con regalos de Regreso al Futuro que le vuelen la cabeza (como aquel rayo a la torre del reloj). Aquí tienes una selección de ideas que no solo son originales, sino que rebosan historia, nostalgia y ese toque de coleccionismo que tanto gusta. Y tranquilo, no hace falta un DeLorean para revivir los buenos momentos: basta con elegir uno de estos seis detalles y preparar el envoltorio con mimo.
Índice
Maqueta del DeLorean
Un coche que viaja en el tiempo no es cualquier coche. Este modelo marcó una época y esta maqueta del DeLorean está tan bien lograda que dan ganas de echarle 1.21 gigavatios y ver qué pasa.
Sin duda alguna es perfecta para quienes disfrutan de sus gustos montando vitrinas temáticas, con su propia iluminación y que luzca lo mejor posible. Si incluye luces, ruedas abatibles o puertas que se abren hacia arriba, ya tienes el regalo perfecto.
Máquina arcade de Regreso al Futuro
Hay detalles que no se pueden explicar, simplemente se juegan. Y una máquina de juegos recreativa con estética ochentera es uno de ellos. Solo hay que encenderla para volver al Café 80’s, con sonidos analógicos y ese brillo en la pantalla que no se olvida.
El diseño tiene vinilos temáticos y botones que suenan como los de antes. Vamos, que solo falta que aparezca Biff a retarte una partida. Este es uno de los mejores regalos para frikis de Regreso al Futuro para quienes crecieron con televisores de tubo y ahora buscan algo que no solo sea decorativo, sino también funcional.
Trilogía en DVD
Sí, las pelis de hoy en día están en las plataformas. Pero todo fan de verdad necesita tener la trilogía en formato físico, con sus extras, sus escenas eliminadas y esos menús de inicio que ya forman parte de la experiencia. Porque ver esta peli en DVD o en VHS no es solo ver una película, es revivirla como tiene que ser.
Es el típico regalo que se guarda como un tesoro. Y si lo acompañas de una sesión de maratón con palomitas, pues mejor que mejor. La emoción está garantizada desde el primer “Marty, ¿has visto el plutonio?”
Monopoly de Regreso al Futuro
¿Te imaginas hacerte con el instituto, el Café 80’s o la torre del reloj? En esta edición especial del Monopoly puedes hacerlo. Y no solo por las propiedades, también por las fichas: el sombrero de Marty, el monopatín, el reloj…
Es como jugar al clásico de siempre, pero con todo el universo BTTF metido en cada casilla. Toma regalo de Regreso al Futuro para quienes disfrutan de las tardes de juegos con un buen punto friki. Y sí, es una excusa perfecta para repetir las frases de la peli mientras tiras los dados.
Pack de pines
No todos los regalos necesitan ocupar espacio en una estantería. A veces, un pequeño pin con la cara de Doc gritando “¡Gran Scott!” dice más que una figura de tamaño real. Y lo mejor es que se pueden llevar a todas partes: en la mochila, en la chaqueta, en la bandolera… tan solo tienes que viajar al futuro para saber dónde la llevarás.
Este obsequio es perfecto para quienes van dejando pistas de sus gustos allá por donde pasan. Es un detallazo discreto y con mucho poder nostálgico, que ayuda a abrir conversaciones y sacar sonrisas de las sanas sin necesidad de decir una palabra para aquellos que lo vean.
Curiosidades de la saga
Cualquier fan que se precie ha visto las pelis más de una vez. Pero lo que no todos saben es que Johnny Depp hizo el casting para ser Marty, que Doc rechazó el primer guion porque no lo entendía, o que Michael J. Fox estuvo realmente colgado durante el rodaje de una escena de la tercera película.
Los regalos de Regreso al Futuro tales como un libro o recopilación con anécdotas y secretos del rodaje son como entregar una cápsula del tiempo en papel. Perfecto para quienes ya conocen cada línea de diálogo y aun así quieren saber más.
Para viajar sin salir del sofá:
- – Porque un regalo no siempre necesita brillar ni costar una fortuna para ser memorable:
- – El DeLorean sigue haciendo soñar, aunque sea en miniatura.
- – Hay formas de jugar, vestir o ver la trilogía que siguen emocionando como el primer día.